En este lugar, donde se encontraba el rancho de Don Basilio Fernández, se reunió el 25 de agosto de 1825 la Sala de Representantes de la Provincia Oriental para proclamar la independencia de Uruguay del Imperio del Brasil. Además, en 1831, el mismo Fernández cedió una parte de su casa para que funcionara el primer centro de enseñanza primaria de la villa.
En 1975, se proyectó la construcción de un Memorial de la Independencia, que nunca se concretó. Actualmente, en su lugar se encuentra un monolito de granito negro que marca el sitio y contiene los números romanos 1825 y 1975. Se cree que este monolito es una cápsula del tiempo que guarda un afiche del sesquicentenario y un pergamino firmado por el Consejo de Ministros de la época.
En una de las paredes del predio se encuentra una reproducción de la obra "Asamblea de la Florida" del pintor Eduardo Amézaga, que conmemora la Declaratoria de la Independencia. Además, en el lugar se hallan un ibirapitá, conocido como el "Árbol de Artigas", por su vínculo con el héroe nacional en su exilio en Paraguay, y un ceibo, la flor nacional de Uruguay, plantado en 2020.
Este espacio no solo conmemora momentos cruciales de la historia uruguaya, sino que también conserva un simbolismo vivo a través de su flora autóctona y los elementos históricos que lo rodean.
Experimenta el entorno inmersivo de nuestros videos 360 grados. ¡Sumérgete y explora!
Explora el mapa y selecciona los puntos de interés. Cada lugar tiene una historia y experiencias únicas esperando ser descubiertas.
Tamaño del texto: